*Califica de infamia acusaciones de EEUU.
18.09.2025 Ciudad de México.- En medio de una creciente controversia internacional, la diputada federal por Morena, Hilda Araceli Brown Figueredo, rechazó de manera categórica las acusaciones emitidas por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos, que la vinculan con la organización criminal “La Mayiza”, una facción del Cártel de Sinaloa.
Desde el recinto legislativo de San Lázaro, Brown Figueredo expresó su desconcierto ante los señalamientos, asegurando que no ha recibido ninguna notificación oficial por parte de autoridades mexicanas o estadounidenses. “No tengo conocimiento formal de ninguna investigación en mi contra. Nadie me ha contactado, ni por teléfono, ni por correo, ni por ningún otro medio”, afirmó ante medios de comunicación.
Sin restricciones financieras ni impedimentos migratorios.
La legisladora, quien anteriormente fue alcaldesa de Playas de Rosarito, Baja California, también desmintió que sus cuentas bancarias hayan sido congeladas. “He realizado pagos y transferencias como parte de mi rutina diaria. No hay ninguna restricción sobre mis recursos”, señaló.
Además, compartió que recientemente cruzó la frontera hacia Estados Unidos por motivos personales, sin enfrentar obstáculos migratorios. “Estuve en el hospital acompañando a un familiar y no tuve ningún problema para ingresar al país. Me enteré de todo esto por la prensa, no por una autoridad”, agregó.
Con más de tres décadas de militancia en el movimiento fundado por Andrés Manuel López Obrador, Brown subrayó que su vida pública ha estado marcada por el compromiso con la transformación y la lucha contra la corrupción. “No tengo nada que ocultar. Mi historia política es conocida por quienes me han acompañado en este camino”, declaró.
En un mensaje difundido a través de sus redes sociales, la diputada atribuyó los señalamientos a una campaña de desprestigio derivada de su activismo. “Seguramente, como resultado de mi lucha, soy blanco de una calumnia que busca desacreditarme. Pero no me detendré”, escribió.
Hilda Araceli Brown ha ocupado diversos cargos públicos, entre ellos la presidencia municipal de Playas de Rosarito, donde impulsó proyectos de infraestructura y programas sociales.
Militante fundadora del movimiento encabezado por Andrés Manuel López Obrador, ha sido una figura activa en la consolidación de Morena en Baja California. Actualmente, forma parte de comisiones legislativas en la Cámara de Diputados, desde donde ha promovido iniciativas en favor de la transparencia y el desarrollo local.
Por supuesto, Billie. Aquí tienes una ampliación del punto 4 sobre las controversias previas que rodean a Hilda Araceli Brown Figueredo, con enfoque narrativo e institucional:
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La acusación de EEUUU se basa en un informe de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC), que la incluye en la lista de personas sancionadas bajo la Orden Ejecutiva 14059, junto con empresarios, expolicías y operadores políticos de Baja California.
Según el documento presentado por el Departamento del Tesoro, Brown habría facilitado el nombramiento de aliados del cártel en puestos clave del gobierno municipal, permitiendo que figuras como Jesús González Lomelí y Candelario Arcega Aguirre —identificados como operadores financieros y políticos del grupo criminal— ejercieran influencia directa sobre dependencias locales, especialmente en el área de seguridad pública.
La OFAC sostiene que durante su administración se recaudaron pagos de extorsión y se brindó protección institucional a las actividades delictivas de los hermanos Alfonso y René Arzate García, líderes de “Los Mayos”, una célula del Cártel de Sinaloa con fuerte presencia en la región fronteriza.
Además, se ha documentado que Brown mantuvo una relación cercana con Arcega Aguirre, lo que habría permitido al operador político colocar a sus colaboradores en cargos estratégicos dentro del ayuntamiento. Esta conexión ha sido interpretada por autoridades estadounidenses como una vía de penetración del crimen organizado en estructuras gubernamentales.
Como resultado de estas acusaciones, Estados Unidos ordenó el bloqueo de todos los bienes e intereses financieros de Brown en su territorio, así como la prohibición de cualquier transacción con ciudadanos o empresas estadounidenses. En México, la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) también habría iniciado el congelamiento de cuentas relacionadas con la red señalada, aunque Brown ha negado que sus recursos estén bloqueados.