El matrimonio Ackerman

Sin duda uno de los matrimonios más repudiados en redes sociales es el de Irma Eréndira Sandoval y John Ackerman, quienes ayer fueron sujeto de critica y mofa cuando Andrés Manuel López Obrador se las cobró por maltratar mediáticamente a su gran amigo Félix Salgado Macedonio. Cibernautas, politólogos y políticos opinaron sobre el tema.

Embate inter-morenista contra el guerrerense que incluso le costó la candidatura de quien es calificado como “impresentable” por estar acusado de acosar y violar como reclaman al menos 5 mujeres.

Mientras Eréndira se desvivía en Twitter por agradecer a AMLO, John Ackerman retomó una crítica al partido similar a la que hizo cuando le dieron la candidatura al gobierno de Guerrero a Salgado Macedonio.

En aquella ocasión Ackerman acusó en Twitter que la designación de Macedonio era “un quiebre histórico” para la autodenominada “cuarta transformación” y afirmó que el partido se acercaba cada vez más “al triste desenlace del PRD.  Este lunes repite su opinión:

“La 4T necesita que Morena sea un partido fuerte y cercano a las bases para resistir los embates de los adversarios y cortar de tajo las intenciones golpistas” señaló en su articulo del lunes:

El partido político Morena se encuentra hoy en un estado de total ilegalidad y ausencia de institucionalidad democrática. Ninguno de sus órganos internos funciona cabalmente de acuerdo con los estatutos del partido y no existe espacio alguno para la participación de la militancia en la toma de decisiones. Comparto una lista inicial de algunos agravios, escribió y se desbarato enumerándolos:

Morena: recuperar la legalidad

 

Eso si, no faltó la explicación no pedida:  “La reproducción de esta lista inicial de preocupantes agravios a la normatividad interna no responde a ningún interés personal ni voluntad de dividir o debilitar al partido Morena, sino todo lo contrario. Lo que se busca es retornar este valioso instrumento del pueblo a la senda de la institucionalidad democrática para que pueda cumplir con su vocación de transformación social y evitar convertirse en un simple trampolín de oportunistas para llegar a cargos públicos”.

Sin embargo el durísimo artículo, por la noche, la supuesta victima de la estrategia del exdelegado federal, hermano de Eréndira Pablo Almícar, les remató el día con una sonrisa triunfal.