“El silencio que queda”, mirada de Amparo Garrido compite en Ecozine

Foto/Ecozine

Por Adela Mac Swiney González.

Madrid, 3 Junio 2021.- (Notistarz).- El primer largometraje de la artista visual española Amparo Garrido, “El silencio que queda”, una mirada al mundo a través de la escucha y del escenario hipnótico de la naturaleza, compite en la sección Largometraje Documental de la 14 edición de Ecozine Film Festival junto con producciones de otras 10 nacionalidades.

El filme es un encuentro con la belleza a partir de dos formas de acercarse al mundo: la mirada y la escucha. Juan Carlos, un amigo querido de la cineasta murió de repente y en su lugar quedó un gran silencio. Tras su muerte encontró un artículo que le había dejado en el buzón sobre un ornitólogo ciego. La historia le fascinó y le llevó a conocer su hipnótico mundo de seres alados.

Eso la llevó, entre otros lugares de Andalucía, a La Janda, en Cádiz y a sitios de Aragón, para adentrarse en un mundo de seres alados de la mano del ornitólogo José Carlos Sires que, con su discapacidad inspiradora le enseña a ver los pájaros de otra manera. Así, la película mira a la naturaleza amenazada por el cambio climático, a la biodiversidad y a cómo los seres humanos vivimos de espaldas a todo ello.

Tras la presentación en la Filmoteca de Zaragoza, Amparo Garrido manifestó estar muy feliz de estar en Ecozine Film Festival. “Estoy muy contenta de presentar la película, especialmente después de tanto tiempo de pandemia, ha sido una gozada, una maravilla, venir y tener este contacto con la gente, con el público, con los compañeros”, señaló.

Sobre el proceso de rodaje de la película, para la cual no había un guion previamente establecido, sostuvo que “una de las cosas que curiosamente más me han gustado es el sometimiento, ya que las aves no vienen cuando tu quieres, hay muchas horas de espera, entonces te das cuenta que no mandas tú, que mandan ellas”.

Aseguró que “rodando esta película tuve esos momentos de encuentro tremendo con la naturaleza, con el silencio, el viento, los pájaros, la soledad, todo fue sumergirme de lleno en la naturaleza, una maravilla, la verdad es que he disfrutado muchísimo”.

La artista visual indicó que cuando empezó la película no tenía idea de que estaría en un festival internacional de temática ambiental. “No se me había pasado por la cabeza, es un regalo del destino, quizá una llamada, algo que repensar, me encanta y me llena de satisfacción”.

Expuso que “El silencio que queda” es un viaje particular que ha hecho, quizá desde un lugar artístico, personal, experimental, pero le ha permitido encontrar a la naturaleza, “lo que ha sido tremendo”.

Para la cineasta, una de las cosas que más le han gustado de esta película es el sometimiento, ya que “las aves no vienen cuando tu quieres, hay muchas horas de espera, entonces te das cuenta que no mandas tú, que mandan ellas, hay otra cosa que manda que está por encima de ti y ese sentimiento que podría enojar mucho, yo lo he disfrutado muchísimo”.

Aseveró que “cada vez que lo conseguía, pensaba qué regalo, qué regalo, después de seis horas allí esperando y llegaban las aves, me encantaba estar en ese lugar en el que no mando yo, en el que no tenía idea de lo que podría pasar”.

“El silencio que queda” es una película de 2019 y sigue siendo “igual de bonita, fresca, actual, especial”, tras los tiempos difíciles de la pandemia, concluyó Garrido.