Escándalo internacional por aprobar a Banxico a comprar efectivo extranjero

* Obligan al banco central a comprar el dinero, venga de donde venga.
* Acusa Álvarez Icaza que la ley es a modo por las presiones del Grupo Salinas.

/Redacción/

México. 10 diciembre 2020.- El Senado de México aprobó un proyecto de ley que obligará al banco central a comprar billetes de dólares a bancos que no pueden colocarlos en otro lugar, ignorando las preocupaciones de los legisladores de que el proyecto de ley podría hacer que el banco acepte dinero ilegal de la droga lo que propiciaría lavado de dinero.

Senadores y senadoras hicieron caso omiso a las advertencias del propio Banxico y de la asociación bancaria del país sobre que el proyecto de ley amenazaba la autonomía del banco central y podría exponerlo a sanciones por lavado de dinero si era aprobado.

La legislación aprobada por la mayoría de Morena, obligaría al banco central a comprar moneda extranjera a los bancos locales, que terminan con dólares en exceso de las remesas en efectivo y el turismo.

Los legisladores introdujeron una modificación al proyecto de ley original, presentado por el líder del Senado de Morena, Ricardo Monreal, que decía que Banxico no tendría que comprar dólares a nadie en las listas negras del gobierno, sin embargo el riesgo es inminente.

Cuestionaron la justificación del líder cameral Ricardo Monreal de Monreal sobre que el proyecto de ley era necesario para ayudar a los migrantes que regresan para las vacaciones con fajos de efectivo. “Este no es un ataque a la autonomía del banco central (.) El Banco de México tiene que ser menos conservador”, expuso.

La oposición amarrada de manos por el voto mayoritario del partido en el poder argumentaron que el proyecto de ley había sido aprobado en el Senado por el partido Morena de López Obrador sin escuchar las inquietudes del banco central.

El proyecto de ley se presentó, sorpresivamente, a fines del mes pasado y Banxico reiteró en un comunicado el miércoles por la noche, que los senadores habían ignorado su opinión y señaló que los “cambios” al proyecto de ley no aliviaron sus preocupaciones.

El Senado aprobó la reforma a la Ley del Banco de México para facultar al organismo a adquirir los dólares que no puedan repatriarse a Estados Unidos.

“Los montos que no puedan repatriarse serán comprados por el Banco de México, para lo cual el Banco, escuchando a la Comisión Nacional Bancaria y de Valores y a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público regulará el procedimiento de compra al tipo de cambio vigente”, se cita en el texto de la minuta.

El senador independiente Emilio Álvarez Icaza levantó la voz para cuestionar si es un proyecto de ley a modo además de convertir a Banxico en “un blanqueador de dinero”.

Álvarez denunció que los cabilderos de Grupo Salinas habían presionado a los legisladores para que aprobaran el proyecto de ley.

“¿Este proyecto de ley está dedicado a uno de los aliados especiales del presidente a quien quiere hacerle un favor?” exhibió Álvarez acerca de las constantes presiones del grupo Salinas, cuyo Banco Azteca ha jugado un papel clave en el desembolso de los programas de ayuda monetaria de López Obrador”, en las políticas públicas del país.

El vocero del Grupo Salinas, Luciano Pascoe, emitió en un mensaje sobre que el grupo “no tenía ningún comentario sobre los rumores que difunde un senador”.

Entre tanto el subgobernador del Banco de México, Gerardo Esquivel, entre otras voces, lamentaron a aprobación que alertaron pueden convertir a México en una lavadora de dinero.

“Lamentable que se hayan aprobado en el Senado reformas a la Ley del Banco de México que ponen en riesgo a las reservas internacionales y que atentan contra la autonomía del Banco de México. Espero que en la Cámara de Diputados se corrija esta situación”, dijo Esquivel en un mensaje en sus redes sociales.

La reforma aseguran los especialistas tiene dos implicaciones principales ya que obligan al Banxico a verificar si el dinero es legal con lo que se le impone una tarea que está por encima de sus facultades. La segunda implicación es que, “al obligarlo a comprar el efectivo excedente, lo vuelve vulnerable ante la recepción de dinero ilícito”.

La iniciativa fue calificada como una violación a la autonomía del Banco de México, porque le asigna obligaciones que, constitucionalmente, no están contempladas en su misión “de preservar el valor de la moneda nacional a lo largo del tiempo y, de esta forma, contribuir a mejorar el bienestar económico de los mexicanos”.

En un comunicado del 7 de diciembre, la Asociación de Bancos de México argumentó que las obligaciones que la bancada de Morena intenta asignar al banco central ya están contempladas en los reglamentos operativos de las instituciones bancarias privadas.