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/ Dario Pale /
28/10/2022/ Xalapa, Ver.- Este día diversos colectivos participaron en el performance que organizó la Unidad de Humanidades de la Universidad Veracruzana, con la finalidad de visibilizar el dolor de las madres que buscan a sus hijas e hijos desaparecidos-
Claudia Ruiz, esposa del desaparecido Rafael Espinosa Gutiérrez, lamentó que la violencia y las desapariciones se están normalizando.
“Desgraciadamente en el estado de Veracruz y a nivel nacional vivimos una masacre, es ya un hecho que se salió de las manos a las autoridades, día con día hay más desaparecidos, desgraciadamente día con día las familias se tienen que sumar a búsqueda a campos, a Semefos, a psiquiátricos, hasta el último rincón del mundo para poderlos encontrar”, acusó.
Dio a conocer que lamentablemente la sociedad se ha ido acostumbrando a las desapariciones, porque hace una década la sociedad se asustaba, ahora la gente solo dice: un desaparecido más.
“Este performance es para visibilizar el dolor de las madres, que ellas están muertas en vida, es un dolor que no acaba hasta encontrarlos”, señaló.
“En esta ocasión fue para todos los colectivos que tienen algún familiar desaparecido, es una manera de visibilizar el infierno, el dolor que todos vivimos, porque ahorita somos nosotros, pero nadie se puede escapar lamentablemente de una situación así”, agregó.
La familiar de Rafael Espinosa Gutiérrez, desaparecido el 15 de agosto de 2013, opinó que la falta de eficacia de la Fiscalía General del Estado hace que se pierda tiempo en las investigaciones dando paso a que los presuntos responsables mueran o huyan de la acción de la justicia.
Finalmente señaló que “Está muy lento todo esto, es importante que esos momentos de la desaparición recopilar todo el historial y detener a los presuntos responsables de estos casos de desapariciones. Una justicia más pronta y expedita para que no caigamos en el error de que aún nosotros señalando a los culpables, la Fiscalía deje pasar tiempo”.
En Veracruz solo han reconocido oficialmente a 7 mil 200 personas como desaparecidas sin contabilizar a todo aque el cruce o transite el estado, como son los migrantes o extranjeros.
Es en Veracruz, donde se encuentra la fosa clandestina más grande de América Latina, El Arbolillo, que junto a Santa Fe, en donde las búsquedas de las madres, hermanas o abuelas han arrojado el hallazgo de 615 cráneos.
Hace una semana las madres de colectivo Solecito viajaron hasta la corte Internacional de La Haya para llevaro los casos de sus hijas e hijos, hermanos, o esposos y denunciar en Veracruz desaparición forzada de Lessa Humanidad.
Lucía Díaz, madre de Luis Lagunes, desaparecido desde el 2013, y fundadora de colectivo declaró “Nosotras acusamos lesa humanidad porque ha sido sistemático, contra un grupo particular de la población, y ha sucedido con la participación de elementos del Estado”.
Jimena Reyes, directora de la FIDH en las Américas, “y es un fenómeno todavía actual y en esta crisis Veracruz ejemplifica el gran problema de las desapariciones forzadas”.
