Feminicidio de Erika Sánchez Evitar entorpecer el debido proceso

Graciela Machuca Martínez

La Fiscalía General de Justicia (FGJ) de Quintana Roo, no ha dado mayor información sobre caso de la joven Erika Sánchez, desaparecida en Tulum desde el 15 de junio del 2019, a fin de no entorpecer el debido proceso legal, pero “hay pistas y resultados” que pronto se darán a conocer, dijo la fuente oficial ala que escribe.

Desaparecida desde el 15 de junio del año en curso, la joven Erika Sánchez fue encontrada cuatro meses después, asesinada, descuartizada y sin cabeza, de la joven de 25 años. Su cuerpo, mismo que reconoció su padre, como se difundió en redes sociales, apareció en condiciones infrahumanas, en la calle las calles Flor de Naranjo con Constituyentes del fraccionamiento Misión, informaron las autoridades judiciales a finales de octubre.

A falta de información oficial sobre el caso de la joven occisa, existen diversas versiones: una que señala que salió el 15 de junio al concluir sus labores en el hotel Azuliztik en Tulum (uno de los mas exclusivos de Tulum); Una versión más refiere que Érika, había ido de campamento a Bacalar desde Playa del Carmen, donde residía, pero ya no se supo de ella, por lo que sus amistades y familia iniciaron con la búsqueda que lamentablemente terminó. Y desde esa fecha y hasta finales de octubre no se sabia de su paradero, denunció su madre Juana Sánchez Basaldúa.
Fue a la denuncia ciudadana de la presencia de una maleta abandonada, de donde se desprenden las primeros indicios de respuesta a la desaparición de la joven.

La información oficial señala que al encontrar la maleta que: “en un principio y debido al tamaño de la maleta se pensó que podría tratarse de un feto” Sin embargo, cuando los peritos revisaron se dieron cuenta que se trataba del cuerpo cercenado de una mujer y se describió así: “Por un lado, estaban el torso y las piernas, envueltos en una sábana y con unos zapatos al lado. Los brazos y la cabeza al parecer fueron mutilados”.
Esa es la primera información sobre la que trabaja la Fiscalía General de Justicia, cuando el padre de Erika identificó el cuerpo.

La madre de Erika, al tener las primeras informaciones del hallazgo del cuero de su hija escribió en redes sociales, “Hola a todos. Como muchos saben, el 15 de junio del 2019, mi hija Erika Sánchez desapareció. Después de muchos meses de búsqueda y sin saber nada de ella, finalmente tenemos noticias. Lamentablemente, mi hija Erika fue encontrada sin vida. Como familia, esta es una situación muy triste y difícil, así que espero que tengan un poco de comprensión y respeto a lo que estamos pasando y sintiendo en estos momentos”.

Y concluye agradeciendo a todas las personas que ayudaron en la búsqueda de su hija, así como a las personas que compartieron en redes socios las publicaciones denunciando su desaparición.

LA VIOLENCIA CONTRA LAS MUJERES EN QUINTABA ROO

Erika Sánchez, como Daniela Patiño en septiembre de 2019, o Dana Rishpy en 2007, o como Vianca Fernanda en 2018, son parte de las estadísticas que fríamente están todos los días en boca del Secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo Montaño, y del propio presidente de la República Andrés Manuel López Obrador.

En el 2019 han sido asesinadas 33, 359 mujeres de los cuales 726 son reconocidos como feminicidios, al mes de septiembre fueron ultimadas 3,645 mujeres de cuales 91 fueron feminicidios, de ese total 12 feminicidios corresponde a Quintana Roo.

Tan sólo en Quintana Roo, en el 2019 la violencia Violencia familiar registra 2,932 casos, y el repunte más alto en el mes de julio con 462 casos, mientras que la incidencia se incremento de enero a septiembre en 58% (205-353 casos). Esta demás, preguntar porque crece la violencia contra las mujeres.

El paraíso del turismo que el presidente Andrés Manuel López Obrador defiende como el generador de divisas producto de los paradisíacos lugares naturales que además de generar divisas al país, ha generado terror y zozobra ante la presencia de la delincuencia organizada y el narcotráfico, de la que poco se habla de la baja incidencia de esta.

Ee en ese tenor que la autoridad se niega a ver, la tierra se mancha de sangre de gente inocente y/o de aquellas personas con cuerpo de mujeres, presas de la desesperación han caído en manos de la delincuencia y el narcotráfico.

Por otro lado, aunque la nueva metodología que utiliza el Secretariado Ejecutivo Nacional de Seguridad Pública (SENSP) busca generar números estadísticos con perspectiva de género, aun esta lejos de registrar el panorama real de los crímenes silenciosos contra las mujeres, no solo del crimen de fuegos cruzados, sino aquellos como el de Erika, que la dilación de la justicia como ese caso, deben tener sanciones ejemplares ante la falta de respuesta inmediata y prontitud de las autoridades que rompe con las condiciones del derecho al debido proceso legal de las personas.

Cierto, el agregado de datos desagregados, permite visibilizar la gama de delitos que se comenten contra las mujeres, pero deja mucho que desear la inclusión de delitos relacionados con violencia contra la mujer, particularmente feminicidio donde las entidades federativas dan cuenta de la forma gradual durante los últimos meses del año, pero, ahí esta el pero, bajo qué perspectiva de los aplicadores de justicia y sus parámetros de normas jurídicas se califica el feminicidio.

Que pasará con el caso de Erika Sánchez?, no basta que el asesinado pague 50 años de cárcel es lo menos que se espera, que además se vuelve una carga económica para el Estado, y aunque pague con cárcel no devuelve la vida a Erika.
El estado, el mismo presidente empecinado en bajar porcentajes de las mujeres muertas, (El delito de feminicidio representa 0.05% en la incidencia delictiva total en enero-septiembre de 2019) como si el porcentaje, fuera lo importante, sino la salvaguarda de la vida de las personas, en este caso, de las mujeres, y su pronta y expedita aplicación de la justicia. Al mes de septiembre, la violencia contra familiar registra el 4.54%, seguida de la violencia de pareja con el 1.78%, violencia contra las mujeres con el 1,17%, y en acoso y hostigamiento, abuso sexual y violación con el 0.05, 0.03, y 0.02 porcentajes respectivamente.