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/Redacción/
Cdmx.- 21 junio 2020.- Secretarios de Estado, subsecretarios coo Hugo López gatell , funcionarios y mandos medios de la nueva burocracia y legisladores de Morena cerraron filas en torno a la titular de la SFP Irma Eréndira Sandoval Ballesteros, y su esposo, John Ackerman, luego de que el periodista Carlos Loret de Mola publicara que entre ambos acumularon en 9 años al menos 6 millonarios inmuebles mientras laboraban como académicos de la UNAM.
En defensa de la Secretaría de la Función Pública (SFP), acudieron en redes las secretarias de Gobernación, Olga Sánchez Cordero; de Energía, Rocío Nahle. Los secretarios de Turismo, Miguel Torruco, el titular de la Unidad de Inteligencia Financiera, Santiago Nieto, y el vocero de la Presidencia, Jesús Ramírez, y hasta el subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell.
Loa abogados “espontáneos” aludieron que se trata de campañas de desinformación contra la funcionaria y de que el móvil de los ataque tienen su origen en el combate a la corrupción que Sandoval encabeza en el gobierno de la cuarta transformación.
La Respuesta de Irma Eréndira Sandoval Ballesteros, en la primera reacción al reportaje de Loret de Mola fue llamarle “sicarios mediáticos” y advertirle que no permitirá que manchen su nombre ni el de su familia, además de amenazarlo.
A nivel del periodismo internacional y defensores de la libertad de información y expresión, Edison Lanza, relator Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), externó su preocupación por la expresión de la secretaria y dijo que las declaraciones de la polémica secretaria estigmatiza el ejercicio periodístico.
Loret de Mola, exhibió además como el gabinete decidió sincronizadamente abogar por la mujer que es cuestionada por no actuar contra Manuel Bartlett y otros funcionarios de la 4T acusados de corrupción.
Carlos Loret calificó de “nado sincronizado” los mensajes de funcionarios del gobierno que aparecieron en las “benditas redes sociales y refirió que con el evidente cierre de filas lo único que exhiben es debilidad, y los insultos son motivados a que no pueden desacreditar el reportaje.
“La secretaria ya aceptó que el gobierno del DF le escrituró un terreno por el que sólo pagó los trámites; que tiene las seis casas y que sorprendentemente las compró en nueve años con los sueldos de académicos de ella y su esposo”.
“El ‘ataque de Estado’ sin argumentos, pero con insultos, demuestra que el reportaje les pegó en la línea de flotación: el discurso anticorrupción que los llevó al poder es pura saliva”, concluyó el periodista.
El esposo John Ackerman advierte que interpondrá demandas y en su columna y redes sociales asegura que En 2018 “ganamos la batalla electoral pero no la mediática. Seguimos bajo un constante asedio de insultos y descalificaciones.Y hoy el escenario es peor. Algunos medios que luchaban contra el PRIAN se han volteado” asevera.