**Prosa aprisa .
/ Arturo Reyes Isidoro /
Ayer ganó Xóchitl Gálvez la candidatura presidencial del Frente Amplio por México; la de la oposición.
Y contra lo que se pudiera creer o interpretar, no fue Beatriz Paredes la que perdió sino Andrés Manuel López Obrador.
Todavía temprano intentó meter cizaña desde su conferencia mañanera queriendo acelerar a la senadora priista.
En forma burlona expresó: “Beatriz aguanta, el pueblo se levanta”, otro recurso más en su desesperación por romper la unidad en el Frente.
No solo no lo logró, sino que alertó a los integrantes del bloque opositor, quienes al caer la noche acabaron de cerrar filas, Beatriz se bajó de la contienda y el PRI todo se sumó a la hidalguense.
Sin embargo, seguramente para completar el proceso y cumplir con una formalidad, horas después Xóchitl dijo que la exgobernadora de Tlaxcala no había declinado pero que la dirigencia nacional tricolor le había dado su apoyo.
En menos de 60 días construyó su candidatura
Menos de 60 días bastaron a Xóchitl para construir su candidatura exitosa y levantar el ánimo de millones de mexicanos que no están de acuerdo en la forma en que gobierna Andrés Manuel y que ven en ella la figura para quitarle el poder.
La hidalguense se registró apenas el 4 de julio como aspirante y el 6 de julio inició su gira para sumar simpatías y adeptos, y ayer se concretó su candidatura.
En su triunfo tiene que reconocerse la participación de Beatriz Paredes, quien le dio legitimidad al proceso interno del Frente bajo el principio de que lo que resiste apoya.
No debió haber sido fácil para ella bajarse de la contienda, y tragar sapos sin hacer gestos, como recomendaba don Adolfo Ruiz Cortines que había que hacer en circunstancias como la de ayer.
Tendrá que procesar el duro golpe, pero hay que reconocerle que aceptó la cruda realidad para ella: su compañera en el Senado le sacaba 15 puntos de ventaja en las encuestas.
Ganan también los partidos de oposición y los ciudadanos
Pero el éxito de la carismática candidata tiene también a otros dos ganadores: los partidos de oposición y los ciudadanos; de hecho, la suya es más una candidatura ciudadana que partidista.
Por primera vez los partidos de oposición se unieron y jalaron juntos y parejo sin fricciones desgastantes y sin llegar a una disputa mezquina hasta el destrozo entre ellos.
Ese es un plus de gran valor porque les demostró a sus dirigentes que sí se puede conciliar para un propósito superior y que unidos pueden emprender una gran empresa como ganar la presidencia.
Ganaron los ciudadanos porque su opinión contó y fue determinante para el triunfo de la candidata que querían, lo que los animará a seguir empujando para obtener más triunfos, el más codiciado, el del próximo 2 de junio de 2024.
De que el de Xóchitl fue más un triunfo ciudadano que partidista lo afirmo con base en cifras del registro que hubo en la plataforma del Frente por cuanto hace a Veracruz.
Del PAN se registraron para participar 18,000 militantes, en números redondos; del PRI, 11,000 y del PRD, 9,000, pero fueron 30,000 los ciudadanos sin partido que lo hicieron, o sea, de 68,000, la mitad fue participación ciudadana.
Con otro dato interesante: de los 11,000 priistas, una gran cantidad no se pronunció por la candidata de su partido, Beatriz Paredes, sino por la del PAN, Xóchitl Gálvez.
Eso da idea de cómo la triunfadora ha logrado penetrar entre la población y ganarse su simpatía, la mayoría, según registros del Frente, mujeres, algo que consideran significativo porque luego “entre mujeres no empatan”, e incluso hay un dicho que dice que no hay peor enemiga de una mujer que otra mujer.
No está por demás mencionar que acuerpando al dirigente nacional Alejandro “Alito” Moreno, el PRI de Veracruz con su dirigente Marlon Ramírez Marín a la cabeza tomó también la decisión de respaldar a Xóchitl.
Unido culmina el Frente su proceso
Así, el Frente culmina su proceso interno unido y con una candidata competitiva, pero además con un gran respaldo ciudadano.
El acuerdo logrado entre los partidos de oposición debió haber caído como patada al hígado del presidente López Obrador, quien no solo está entrometido en el proceso electoral, sino que ha combatido con todo a la senadora hidalguense.
En realidad, el de Macuspana sufrió ayer una gran derrota (oootraaa más) por parte de la oposición y en especial de una mujer que lo desquicia y contra la que no puede.
Aquí cabe preguntar, cuando tiene resultados adversos como el de ayer, ¿le sirve de algo la popularidad que presume de 60 por ciento en promedio?
¿Le sirvió de algo o para algo cuando no pudo sacar adelante las tres grandes reformas constitucionales de su sexenio: eléctrica, electoral y la del pase de la Guardia Nacional a la Sedena?
Despierta interés ahora saber cómo va a culminar el proceso de selección de la candidata o del candidato en Morena y si la candidatura de la hidalguense va a modificar la decisión de López Obrador a favor de Claudia Sheinbaum.
Xóchitl revitaliza la vida democrática
Bendita mujer, Xóchitl Gálvez vino a revitalizar la vida democrática del país y a darle a los mexicanos una opción contra el gobierno de un solo hombre, vertical, autoritario, que no respeta las leyes ni las instituciones y que quiere someter, para manejarlo a su antojo, al Poder Judicial que tiene a su máximo exponente en la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
No que la senadora panista ya haya ganado la presidencia y el poder, pero no tengo ninguna duda que con su arrastre contribuirá a evitar que Morena tenga mayoría absoluta en la Cámara de Diputados y con ello, como lo ha advertido, López Obrador haga y deshaga a su antojo en el último mes de su gobierno y ponga al país patas arriba, más de como ya lo tiene.
Habrá repercusiones en Veracruz
Lo ocurrido ayer tendrá repercusiones en Veracruz. En el gobierno de Cuitláhuac García Jiménez seguramente empezaran a poner en orden las cosas, a cuadrar cifras, a limpiar archivos, todo lo que los ponga en peligro de ir a parar a la cárcel, pues ahora ya no tienen ninguna seguridad de que su partido seguirá en el poder.
También tendrán que pensarlo muy bien si mantienen en la cárcel a miles de inocentes, muchos de ellos militantes de partidos de oposición, porque por esas cosas de las circunstancias políticas en meses los que estén ante los tribunales pueden ser ellos.
Con otra cosa más: el avance de Xóchitl ha fortalecido al panismo de Veracruz, cuyos dirigentes han desarrollado un trabajo intenso pero callado, están trabajando ya con los más importantes sectores de la vida pública de Veracruz y no tienen ninguna duda que van a derrotar a Rocío Nahle si la imponen como candidata de Morena.
Incluso tienen ya opciones que consideran competitivas y triunfadoras si se determina que ya sea solo el PAN, o en alianza con el PRI y el PRD, acuerdan que sea postulada una mujer
A condición de que no se revelen detalles, en corto muestran elementos que sustentan lo que dicen y por qué lo afirman. Prefieren no hacer ruido por ahora, pero Morena no tendrá ningún día de campo en 2024.
Como consecuencia, a partir de ya se espera que se incremente la embestida del gobierno de López Obrador contra Xóchitl y los dirigentes de los partidos de oposición, pero no se ve cómo van a parar el apoyo ciudadano.