*Antonia Barra y Tania Romo divulgaron el artículo “Stress symptoms and positive coping during coronavirus disease 2019: The need to look at health from a gender perspective” .
*Trabajaron con una muestra de 665 personas que se realizaron la prueba de COVID-19 en el Centro de Estudios y Servicios en Salud de la Universidad Veracruzana.
/ Carlos Hugo Hermida Rosales /Fotos: Cortesía Antonia Barranca y Tania Romo /
31/08/2023, Xalapa, Ver.– Investigadoras de la Universidad Veracruzana (UV) analizaron los síntomas del estrés provocado por la pandemia de COVID 19 desde la perspectiva de género y sus resultados serán presentados en PLOS ONE, revista científica de alto impacto orientada a temas relacionados con ciencia y medicina.
En conjunto con otros colegas, Antonia Barranca Enríquez, del Centro de Estudios y Servicios en Salud, y Tania Romo González de la Parra, del Instituto de Investigaciones Biológicas, divulgaron el proyecto “Stress symptoms and positive coping during coronavirus disease 2019: The need to look at health from a gender perspective”.
Antonia Barranca explicó que utilizaron una metodología con el fin de examinar los síntomas del estrés y el afrontamiento positivo desde una perspectiva de género.
Para este propósito se aplicó un inventario de sintomatología de estrés, una escala de afrontamiento positivo a la vida, y un cuestionario de datos generales a 665 individuos que se realizaron la prueba de COVID-19 en el Centro de Estudios y Servicios en Salud en el periodo de julio de 2020 a noviembre de 2021.
La investigadora mencionó que a raíz de la pandemia muchas situaciones afectaron de manera directa o indirecta a la población, como la lejanía entre personas, impacto económico negativo, aislamiento social, y cambios en las actividades laborales y educativas, que provocaron la mayor recesión mundial desde la Gran Depresión –crisis financiera de 1929–.
El cierre de locales comerciales y las restricciones en viajes dispararon los casos de estrés y depresión, principalmente entre la población femenina.
Tania Romo comentó que si bien en la pandemia se llevaron a cabo muchos estudios en torno a la salud mental, en raras ocasiones abordaron la perspectiva de género.
“Aunque la COVID-19 afectó en mayor medida a las personas con comorbilidades –quienes presentan dos o más enfermedades–, las mujeres tuvieron más síntomas de estrés físico, psicológico, social y global que los hombres”, puntualizó.
Esto fue debido a que durante el confinamiento las cargas de trabajo no fueron las mismas para la población femenina y masculina, pues la primera se ocupó de la crianza de los niños y el cuidado de los enfermos, y estuvo más expuesta a contagiarse.
Aunado a ello, algunas sufrieron casos de violencia doméstica, ejercida por sus parejas o familiares.
Al comparar los niveles de malestar entre mujeres y hombres, las primeras tuvieron valores más altos y estadísticamente significativos en todas las escalas del inventario de síntomas de estrés.
Por su parte, los hombres presentaron asociaciones entre síntomas de estrés físico, general y social, e hipertensión arterial y diabetes mellitus.
Antonia Barranca manifestó que es fundamental que la población haga conciencia de la importancia de atender situaciones de estrés, y del uso del afrontamiento positivo ante cualquier dificultad.
Recordó además que “los trabajadores de la UV pueden acudir a los espacios que la institución les brinda para cuidar su salud mental, y la sociedad en general a los del estado”.
Finalmente, Tania Romo comentó que es necesario implementar políticas públicas con perspectiva de género, a fin de fomentar la atención a sus necesidades.