La justicia en México provoca este dolor. Sufrimiento que alcanza cada día a más y más familias ante la negativa presidencial de combatir a la delincuencia, DO, organizada con carteles, con fiscales o policías y hasta jueces.
“Pinche Presidente, ¿en qué país vives? ¿que no ves que si existimos” le gritan desde el balcón de la CNDH las madres agraviadas, víctimas de la omisión del gobierno que dijo acabaría con la delincuencia y la ha reproducido exponencialmente.
Mujeres, madres, Hermanas de desaparecidos, hijos e hijas muertos, niñas violadas, masacradas, familias desplazadas por la violencia, que siguen sin ser atendidas a tres días de haber tomado las instalaciones de la Comisión Nacional de Derechos Humanos en ciudad de México.
Mujeres que toman las oficinas de la CNDH ante la ausencia de procuración de justicia, la indolencia, la falta de empatía y cumplimiento del deber legal de autoridades.
Cansadas de la justificación oficial que esgrimen “ajustes de cuentas”, o “andaba en malos pasos”, o “estaba en lugar y momento equivocado”, discursos que siempre sacan ante los ataques a la población civil, que crece y crece al amparo de colusiones de institutos que debiera proteger a la ciudadanía de la delincuencia organizada, las mujeres actúan y se erigen como la real oposición al gobierno que desdeña su desconsuelo.
Gobiernos jueces, policías y ministeriales, fiscalías tienen que rendir cuentas ya!
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Tiene toda la razón esta persona.
La @CNDH es omisa, y utilizada con fines políticos y en algunos estados de la república. @esmeraldatroiti @JoelHernandezG @DESCA_CIDH @CIDH https://t.co/VIZIiMcIVL
— Artwitt (@Artutwitt) September 5, 2020
