María Ignacia Rodríguez de Velasco, la mujer que derribó prejuicios y luchó por la Independencia <

*

Por

15/09/2022/ Cimac Noticias/  Ciudad de México.- Al hablar de las mujeres que nos dieron matria y libertad no podemos dejar fuera a María Ignacia Rodríguez de Velasco, mejor como “la Güera Rodríguez”, quien fue transgresora, enfrentó prejuicios de la época y se convirtió en una pieza clave de la lucha por la Independencia.

A lo largo de la historia su vida se ha contado por diversas voces, escritoras y escritores la definen como “la primera mujer en México que, sin ser electa, ejerció poder político”, “la heroína fundamental de la independencia de México”. Incluso hay quien asegura que es muy probable que sin ella “no se habría consumado la Independencia”, destaca la investigación La Güera Rodríguez: la construcción de una leyenda del Colegio de México.

Fotografía: Museo de la Mujer

“Fue figura importante en el movimiento independentista, al cual apoyó económicamente, al grado que pesó sobre ella una acusación de herejía por defender la independencia y por mantener trato con el cura Miguel Hidalgo y Costilla”, según información de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

Debido a lo anterior, el 22 de marzo de 1811 María Ignacia Rodríguez de Velasco fue presentada ante el tribunal del Santo Oficio debido a dichas acusaciones, y una más por un supuesto adulterio.

“Güera” Rodríguez, una mujer emancipada

María Ignacia Rodríguez de Velasco también se convirtió en víctima de violencia que por siglos ha permeado en la sociedad mexicana patriarcal. Y es que en 1792 contrajo matrimonio con el militar José Jerónimo López de Peralta, con quien tuvo cuatro hijos.

El matrimonio llegó por una denuncia de intento de asesinato, ya que presuntamente López de Peralta la golpeaba e intentó quitarle la vida con un disparo de bala. Mientras que su esposo la habría acusado de cometer adulterio, de acuerdo con la especialista en historia de México, Isabel Revuelta Poo.

A la “Güera” Rodríguez, su libertad ideales la llevaron a ser juzgada como una “violación al ideal femenino”. Incluso el Colegio de México destaca que su fama se debió al sexismo mexicano, ya que pese a su prestigio como actora política, “nunca se borró su identidad de femme fatale”.

Sin embargo, nosotras la celebramos porque superó los prejuicios de su época, también enfrentó a su marido abusador, venció a los inquisidores y finalmente, tuvo un papel central en derrocar al régimen colonial para darnos matria libertad.