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13.12.2025 Ciudad de México.- El gobierno de México y Estados Unidos alcanzaron un acuerdo para regularizar las entregas de agua previstas en el Tratado de Aguas de 1944, el cual entrará en vigor la semana del 15 de diciembre, según comunicados oficiales del Departamento de Agricultura estadounidense y reportes de prensa.
De acuerdo con la información disponible, México se comprometió a entregar volúmenes adicionales para cubrir déficits acumulados en el ciclo actual y el anterior, así como a presentar un plan de distribución más amplio antes de que concluya enero.
El entendimiento ocurre tras meses de tensiones bilaterales por los retrasos en las entregas mexicanas del río Bravo, un tema que ha generado presiones políticas en Texas y en el gobierno estadounidense.
Las autoridades de Estados Unidos señalaron que el acuerdo busca fortalecer la gestión del agua en la cuenca del río Bravo y garantizar el abasto para agricultores del suroeste estadounidense.
El proceso estuvo marcado por una presión sostenida del presidente Donald Trump, quien públicamente exigió que México cumpliera sus obligaciones del tratado y advirtió que impondría aranceles adicionales si no se alcanzaba un acuerdo.
En comunicados oficiales, funcionarios estadounidenses destacaron que Trump “continúa poniendo a los agricultores estadounidenses primero” y que su gobierno estaba “haciendo valer” los compromisos internacionales de México. Días antes del anuncio, el presidente estadounidense había reiterado que tomaría medidas comerciales si no se resolvía el diferendo hídrico, lo que aceleró las negociaciones entre ambos países.
El acuerdo se inscribe en un contexto de sequía prolongada en el norte de México y el sur de Estados Unidos, así como de tensiones recurrentes por el cumplimiento del tratado, que establece ciclos quinquenales de entrega de agua.
México había reconocido previamente retrasos y propuso mecanismos para diversificar las fuentes de suministro y reducir los faltantes antes del cierre del ciclo.
