/ Por Inocencio Yáñez Vicencio. /
¿ Cómo interpretaría usted que quienes abandonaron una familia por condiderarla corrupta, ahora la inviten o llamen a la casa que fundaron ? Obviamente se están hincando pidiendo perdón ante falsos que levantaron o con ello están reconociendo que son iguales.
Andrés Manuel López Obrador, abandonó al PRI cuando no le dieron la candidatura al gobierno de Tabasco, no porque lo acusara de corrupto o de haberse desviado de sus principios. No fue ni una cuestión moral ni una cuestión ideológica. Sencillamente fue porque no le dieron lo consideraba que era suyo. Recordemos que todavía vivíamos una etapa autoritaria en que un destape equivalía a un cargo, porque las elecciones solo confirmaban lo que previamente decidía el partido hegemónico. En este partido se formó.
En todo caso exigía democracia para él, no para su partido. Nunca luchó por reglas y principios democráticos. En todo caso, su trayectoria muestra que que no le importan las reglas, que para serlo necesitan ser de carácter general sino sus reglas, motivo que lo llevaría más tarde a dejar el PRD, porque no nació para actuar dentro de reglas comunes sino de sus reglas.
La más grande aberración es llamar demócrata a una persona que no sabe más que de su voluntad, que condena y persigue lo que no brota de su capricho, con lo cual retorna al mando personal y a la concentracion del poder en una sola voluntad.
No naciendo Morena como un movimiento ni moral ni democrático, nada de raro tiene que asi como para arribar al poder haya congregado fuerzas de todo el espectro político y ahora, para tratar de perpetuarse invite a los grupos que más ha ofendido y despotricado, con lo cual enseña su hipocresía y falsedad.
No únicamente Morena hizo política atacando la política, se ubicó fuera política, se presentaba como un movimiento no político, distinto a las que llamó ” mafias del poder”, sino que hizo hasta lo imposible por parecer una fuerza distinta al PRI. Obviamente, a Amlo venía del PRI y tenía que hacer todo por mostrar que nada tenía que ver con él. Suplantar la división política entre gobernantes y gobernados como la única división de la sociedad tiene la ventaja de ocultar las verdaderas contradicciones sociales que dan origen a la pluralidad partidista, pero también hacer uso de un moralismo que permite ver únicamente como corruptos a los que están en el gobierno y mártires y víctimas a los opositores, lo cual Morena explotó tanto que ahora empieza a intoxicarla.
Lo he dicho y lo repito. Un hombre no siempre es un partido, salvo en el caudillismo como el de Morena, pero un grupo sí lo es, más tratándose de su núcleo. No se puede negar que el grupo Atlacomulco era el PRI en el Estado de México, como no se puede negar que el grupo de Javier Duarte, que ha emigrado a Morena, señalado por Amlo, de lo peor, era en el sexenio 2010-2016, el PRI de Veracruz.
Veracruz tuvo gobernadores inútiles, incapaces, inservibles, buenos para nada, que emulando a Caligula, trajeron lacayos que vinieron a enriquecerse, pero nadie como Dante y Duarte, se vieron involucrados en grandes escándalos de corrupción, que curiosamente son dos personajes que se empeñan en presumir de lugartenientes de Amlo. Uno por un motivo, otro por razones diferentes, pero cada quien cumple tareas de su patrón.
Tomando en cuenta que quienes acompañaron en el saqueo a Duarte, fueron Fernando Arteaga, Tato Vega, Jorge Carvallo, Vicente Benitez, Gabriel Deantes, Salvador Manzur, Anilú Ingram, Pepín Ruiz, José Manuel Del Castillo, Ivan…y que ahora se van a Morena, significa un acto de absolución.
La salida del PRI de la banda jefaturada por Duarte, no es cualquier cosa. Para el tricolor se trata de un regalo navideño nada despreciable. Limpiar la casa siempre será un acto loable, pero si ello implica que todos los calificativos despectivos que se lanzaron contra él por lo que se le imputa a estos malechores y estos malandros ahora se van a Morena, sólo un obtuso puede negar que a quien perjudica es a quien los recibe, no a quien abandonan.
Muchas cosas no se pueden decir ni en la plaza pública ni en una publicación, pero me atrevo a expresar aquí que si los priistas saben bajar al ciudadano de a pie esta maniobra como lo que es: una postración de Morena ante el PRI, que reconoce que los que robaron a manos llenas con las siglas del PRI, sirvieron y sirven a Morena, que con un desplante de soberbia y cinismo acoge la banda de Duarte, harán que el electorado vote a favor de Pepe Yunes y le diga no a la zacatecana.
Soy un lector de todas las columnas de los veracruzanos y creo pertinente hacer una precisión a quien no me ha leído. Yo saqué la cara por Anilú, tan pronto fue cuestionada por votar a favor de una iniciativa de Morena y ser cuestionada por ello, y no sólo eso, me mantuve en contacto con ella para animarla, sabiendo lo que planeaba , sin que lo diera por cierto.
La mayoría de quienes nos referimos a ella no es por ser mujer. Quienes la pusieron en el centro fueron los que capitanean su grupo. Para mi es una persona que tiene muchas cualidades para lo social, que es muy distinto a lo político. Tal vez no ve el PRI más pluris y las busca por otra parte. Miren, a Carvallo, sé que en ENEP Acatlán lo conocían por porro.
Su padre lo ha descrito muy bien. Cualquier auditoría mostraría que no puede justificar que honradamente haya acumulado tanto dinero en los sexenios de Fidel y Duarte. Delató sus planes desde que envió a su testaferro de pacotilla, Francisco Baez, con el secrtario morenista de la SEV, Recuerdo que siendo secretario de Sedesol, ante una comparecencia suya, un interlocutor me dijo: dile a tu amigo que no tome esas poses y ese sonsonete, que no sea tan fanfarrón. Me dio tanta pena, que me lo guardé.
La pandilla de Duarte emigra a dónde pueda seguir haciendo lo que ha hecho siempre y Morena al recibirla, demuestra que si sabes mentir, traicionar y robar, eres bienvenido a sus filas, con tal que repartas y compartas el botín.