*Responde así a lo expresado ayer por el CCE.
* Niega ruptura con los empresarios y pone de ejemplo su reunión con algunos que han expresado no estar de acuerdo con sus estrategia de reactivación económica.
/Redacción/
Cdmx., 08 abril 2020 -El Presidente Andrés Manuel López Obrador reaccionó este miércoles al gran pacto nacional que convocó el Consejo Coordinador Empresarial (CCE), cuyo dirigente llamó a las y los inconformes con la nula política de apoyo a Pymes del Gobierno federal a manifestarse en las urnas en la próxima consulta de la revocación del mandato.
El Presidente de la república advirtió que enviará una carta a Carlos Salazar Lomelín, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), con la lista de 15 empresas que le deben al erario 50 mil millones de pesos y además ordena al SAT cobrar el millonario adeudo a esos empresarios.
Sobre la solicitud de las cámaras y Mipymes de diferir el pago de impuestos al SAT y en las cuotas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) para enfrentar la crisis económica desatada por la pandemia del coronavirus, el mandatario dio un no tajante.
“No podemos diferir el pago de impuestos, al contrario, le vamos a pedir a Carlos Salazar que nos ayude hablando con los dueños de las grandes empresas que deben a la Hacienda pública. Ya le voy a mandar hoy la lista, porque si nos pagan tendríamos muchos más recursos para apoyar a las pymes”, refirió el mandatario.
López Obrador dijo entender la postura del líder empresarial, pues defiende a su gremio y explicó su idea de que al momento que se solicita el que haya una tregua en el pago de impuestos, aunque se hable en nombre de las pymes, “se corre el riesgo -y así lo dice la historia- de que se vayan ahí todos”.
“Imagínense si se nos cae la recaudación y no tenemos para apoyar a los pobres, pero es mejor lo que estoy planteando.
De acuerdo al presidente hay 15 grandes contribuyentes que, incluyendo multas, recargos, deben según las cuentas del SAT, 50 mil millones de pesos.
“Entonces, si estoy hablando de que vamos a entregar créditos a un millón de pequeñas empresas familiares, si cobráramos los 50 podríamos entregar tres millones, pero, bueno, si se llega a acuerdos y abonan 25, pues ya son dos millones de créditos”.
“Yo entiendo que él, Carlos Salazar, está en su papel, lo dije, del defender a su gremio, pero ojalá y también él entienda que yo estoy aquí para representar los intereses del pueblo de México, de todos. Y lo digo porque no engaño a nadie, estoy aquí para atender a todos, escuchar a todos, respetar a todos, velar por el bien de todos, pero procurar darle preferencia a la gente humilde”.
En la víspera el dirigente del CCE convocó a las empresas a emprender acciones propias para salvar los empleos, sin la ayuda del gobierno tras que señaló le cerraron las puertas a quienes proponen un plan de 90 Días para paliar los estragos económicos de la pandemia Covid 19.
“Sabemos que con esta reunión podemos abrir la puerta sin necesidad de que el Gobierno nos apoye”, señaló Salazar Lomelín al convocar a un liderazgo alternativo.
Asimismo el jefe del ejecutivo, negó que haya ruptura con los empresarios. Esto fue lo que dijo al respecto:
“Tengo una comunicación permanente con los empresarios, esto es notorio, en los últimos días me he reunido con muchos empresarios. Estos empresarios la mayoría está cumpliendo la recomendación de que no se despida a sus trabajadores y se les mantenga el salario, la mayoría.
Dos, como ayer el señor Juan González, de Maseca, ofreciendo que no va a aumentar el precio de la harina de maíz para que no aumente el precio de las tortillas.
El primero que mandó decir que no iba a despedir a sus trabajadores fue Carlos Slim, pero me lo ha dicho Alberto Baillères, Germán Larrea.
Ayer los empresarios de Monterrey, se hizo el compromiso de que la Secretaría de Salud iba a hacer un análisis riguroso para definir cuáles son las empresas que pueden seguir operando, aún con la epidemia y se está atendiendo esto.
Hicimos también nosotros el compromiso de devolverles el IVA que por ley les corresponde a las empresas lo más pronto posible, es un compromiso.
Estamos otorgando o estamos preparando el otorgamiento de estos créditos, nos están ayudando los bancos.
O sea, no hay ruptura, sencillamente no estamos de acuerdo con el plan de rescate que ellos proponen, porque consideramos que debemos primero atender a los más necesitados, a los de abajo y que no debemos endeudar al país. Ellos sostienen que se debe pedir deuda, no les estoy diciendo mentiras, ellos quieren que se pida deuda, que se incremente la deuda; yo no considero que eso sea conveniente.
Si no podemos con lo que estamos haciendo, pues como decía Juárez, nadie está obligado a lo imposible, pero podemos hacerlo de otra forma y lo único que pedimos es que nos permitan llevar a la práctica nuestro programa de recuperación económica.
Bueno, primero, que salgamos de la emergencia sanitaria y luego nuestro programa de recuperación económica, con tres ejes, que esto es lo que los descontrola, porque no se hacía antes.
Primero, fortalecer a la mayoría de la población, a los pobres, garantizar apoyos para 22 personas en condiciones de pobreza y vulnerabilidad, 22 millones, primero.
Segundo, otorgar dos millones 200 mil créditos en total, porque aquí estamos hablando de un millón para pequeñas empresas familiares, pero además son créditos de vivienda y además créditos también personales a los trabajadores al servicio del Estado, en total son dos millones 200 mil.
Y tres, la creación de dos millones de empleos.
Nosotros sostenemos que con estas tres medidas va a reaccionar la economía, va a haber una derrama económica, va a haber empleos, se va a fortalecer el consumo, el mercado interno y vamos a salir adelante.
Y hay otras cosas.
Estamos avanzando para que entre en vigor el tratado lo más pronto posible. Me pidieron ayer los del Grupo Monterrey, sobre todo hablaron en nombre de las empresas automotrices y de autopartes las que venden insumos, autopartes a Estados Unidos.
En Estados Unidos está parada la rama automotriz, completamente parada en Estados Unidos, pero la van a reabrir y esa rama económica que genera en México, un millón de empleos, al reabrirse en Estados Unidos tiene que tener insumos que se producen en México.
Entonces, me pidieron ayer que sí, ya tienen conocimiento de que un día se va a abrir la rama automotriz en Estados Unidos para seguir produciendo, que nosotros a partir de ahí autoricemos de tres a cinco días abrir aquí para que les dé tiempo de echar a andar sus plantas y embonar, establecer, la cadena de producción con Estados Unidos. Le dije sí a ese planteamiento.
Entonces, no hay diferencias de fondo. Puede haber politiquería, porque acuérdense ustedes cuando el movimiento feminista, de cómo se volvieron de la noche a la mañana feministas los conservadores, y luego con esta epidemia también se volvieron especialistas y ahí están, siguen todavía.
Imagínense que nos vaya mal, toco madera y me hinco, pero una situación como la de Guayaquil, ya me los imagino a todos estos, con equipos especiales, gorras y con el micrófono ahí haciendo entrevistas a los enfermos, o sea, porque es otra cosa.
Vean los periódicos, nunca había visto en los periódicos… El Universal se volvió opositor, ni en los tiempos del maestro Palavicini, cuando se fundó, estaba tan opositor; y así todos, para qué les cuento del Reforma. Y están de veras muy enojados, contrariados, pero ojalá y se vayan serenando, el passiflorine es bueno, el té de flor de tila”.
