*Es el visitante que acompañó al eclipse total de Sol
13.04.2024.- El cometa L12 Pons Brooks, conocido como el “Cometa Diablo”, es aún visible desde la Tierra sin necesidad de instrumentos especializados, lo que lo convierte en un espectáculo astronómico único y fascinante
El 21 de abril de 2024 será el momento culminante, cuando esté a unos 66 millones de kilómetros del Sol. En ese momento, será visible desde la Tierra sin necesidad de instrumentos especializados. Así que, si deseas apreciar este espectáculo astronómico único, asegúrate de estar atento al cielo en esa fecha.
El cometa 12P/Pons-Brooks, también conocido como cometa diablo, es un visitante poco común en la Tierra. Su órbita excéntrica lo lleva a los remotos confines del sistema solar la mayor parte del tiempo.
Aunque requiere cierta pericia para detectarlo, su envoltura luminosa, llamada coma, es visible a simple vista al atardecer. Este fascinante cometa visita la región interior de los planetas rocosos, incluyendo nuestro entorno, aproximadamente cada 71.2 años.
La última oportunidad para ver el cometa diablo se debe a su órbita
excéntrica. A medida que se acerca al perihelio (su punto más cercano al
Sol), su brillo y visibilidad aumentan significativamente.
Radiación y fuegos artificiales
En su rotación alrededor del Sol, las regiones activas del cometa 12P/Pons-Brooks quedan expuestas periódicamente a la radiación solar. Los gases emitidos se ionizan al interactuar con las partículas cargadas del viento solar, produciendo la preciosa cola iónica, típicamente azulada.
Cuando se acerca al Sol, experimenta actividad criogénica interna, lo que le otorga una brillante coma y una cola variante.
La formación de estas características únicas en los cometas, se debe a que el Sol calienta los hielos que forman parte de su núcleo, que tiene aproximadamente 35 km de diámetro.
El cometa ‘Diablo’ se acerca a la Tierra y es tres veces más grande que el monte Everest.
El cometa ha mostrado una gran variabilidad, con estallidos luminosos debido a la sublimación súbita de los hielos de su superficie. La corteza externa se debilita y fragmenta, liberando pequeños bloques de materiales agregados de baja consistencia.
Estos fragmentos, formados por una amalgama frágil de hielos, materia orgánica y partículas de polvo micrométrico, contribuyen a dispersar la luz solar, creando la apariencia neblinosa de la coma y la cola de polvo.
Un apodo poco común
Aunque su nombre pueda evocar imágenes infernales por su cola doble, cual cuernos de Belcebú, el cometa diablo es un intrigante viajero celeste que nos brinda la oportunidad de maravillarnos con su presencia cada siete décadas.
La órbita del cometa diablo es notablemente alargada y elíptica, lo que provoca que se acerque y aleje significativamente del Sol en cada ciclo. Según los cálculos de los astrónomos, el cometa diablo alcanzará su punto más cercano al Sol, conocido como perihelio, el 21 de abril de 2024.
En esa fecha, el cometa estará a aproximadamente 0.44 unidades astronómicas (UA) del Sol, lo que equivale a unos 66 millones de kilómetros. Para ponerlo en perspectiva, la distancia promedio entre la Tierra y el Sol es de una UA, o alrededor de 150 millones de kilómetros.
A pesar de su proximidad relativa al Sol, no hay riesgo de colisión con la Tierra, ya que la distancia mínima entre ambos cuerpos será de aproximadamente 0.8 UA, equivalentes a unos 120 millones de kilómetros.
Cometas, una perspectiva general
Los cometas son cuerpos celestes que se formaron hace aproximadamente 4,600 millones de años, durante la etapa inicial de nuestro sistema solar. Estos objetos son los remanentes de material primordial que no llegaron a formar parte de los planetas ni de los asteroides.
Los cometas se encuentran principalmente en dos regiones del sistema solar: la nube de Oort y el cinturón de Kuiper.
Nube de Oort:
Es una esfera hipotética que rodea al sistema solar a una distancia de entre 50,000 y 100,000 Unidades Astronómicas (UA) del Sol.
Se cree que contiene miles de millones de cometas que pueden ser perturbados por las fuerzas gravitacionales de las estrellas cercanas.
Estos cometas pueden ser enviados hacia el interior del sistema solar.
Son conocidos como cometas de largo período, ya que tardan más de 200 años en completar una órbita.
Cinturón de Kuiper:
Es un anillo plano que se extiende desde la órbita de Neptuno hasta unas 50 UA del Sol.
Contiene miles de objetos helados, incluyendo algunos planetas enanos como Plutón o Eris.
También alberga muchos cometas que pueden ser alterados por las interacciones con los planetas gigantes, especialmente con Neptuno.
Estos son los llamados cometas de corto período, que tardan menos de 200 años en completar una órbita.
El cometa diablo es, sin lugar a dudas, uno de los fenómenos astronómicos más intrigantes y enigmáticos que podemos observar desde la Tierra. Su imponente tamaño, su forma peculiar, su actividad volcánica y su órbita alargada lo convierten en un objeto celestial verdaderamente único.
Fuente Meteored
