*Hay lecciones clave de la experiencia Covid-19 de Nueva Zelanda, articuladas por la primera ministra.
/Redacción/
NZ. 09 agosto 2020.- Nueva Zelanda reporta que desde el primer caso conocido importado a Nueva Zelanda el 26 de febrero hasta el último caso de transmisión comunitaria detectado el 1 de mayo, la eliminación del virus tomó 65 días.
La Primera Ministra Jacinda Ardern que preside al país insular decretó una cuarentena obligatoria de 4 semanas en todo el territorio, en el cual se cerraron todas las escuelas y los negocios no esenciales, además de las fronteras.
Lo mismo ocurrió con las playas, parques, bares y restaurantes aunque solo tuvieran servicio de delivery, quienes no funcionaron desde el pasado 26 de marzo.
Los residentes que llegaron desde el extranjero también tuvieron que someterse a un confinamiento y a pruebas para saber si eran portadores de Covid-19.
Por otro lado, la policía habilitó un número telefónico para que los propios vecinos denunciaran a quienes incumplían la cuarentena.
Nueva Zelanda es uno de los países que mejor están gestionando la crisis del coronavirus, todos ellos liderados por mujeres. En este caso, la primera ministra Jacinda Ardern, cuya popularidad se ha disparado gracias a esa extraordinaria gestión para frenar el avance del coronavirus y gestos como una interacción virtual con niños y niñas para hablar con ellos sobre la pandemia, es quien lidera ahora la recuperación de la economía y el turismo de este país.
La primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, propone para reactivar el turismo y la economía, incorporar una semana laboral de cuatro días para recuperar la economía y el turismo interno tras haber vencido al coronavirus.
EL PLAN JACINDA
Nueva Zelanda se basó en tres tipos de medidas para deshacerse del virus el primero fueron controles fronterizos continuos para evitar que Covid-19 ingresara al país; el segundo, un cierre y distanciamiento físico para detener la transmisión comunitaria y tercero, controles basados en casos mediante pruebas, rastreo de contactos y cuarentena.
En conjunto, estas medidas lograron un número reducido de casos y muertes en comparación con los países de altos ingresos de Europa y América del Norte que siguieron una estrategia de represión.
Nueva Zelanda es una de las pocas jurisdicciones, incluidas China continental, Hong Kong, Taiwán, Corea del Sur, Vietnam, Mongolia, Australia y Fiji, que persiguen la contención o eliminación del Covid-19. La mayoría ha tenido nuevos brotes. Las excepciones son Taiwán, Fiji y Nueva Zelanda.
Australia adoptó respuestas muy similares a la pandemia y es importante señalar que la mayoría de los estados y territorios están en la misma posición que Nueva Zelanda. Pero Victoria y, en menor medida, Nueva Gales del Sur están experimentando un resurgimiento significativo.
La diferencia clave es que Nueva Zelanda se comprometió relativamente pronto con una estrategia de eliminación claramente articulada y la siguió de manera agresiva. Un bloqueo intenso demostró ser muy eficaz para extinguir rápidamente el virus.