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04.03.2024.- Volker Türk, el alto comisionado de la ONU para los derechos humanos, ha emitido un llamado urgente para proteger el periodo electoral de México ante una preocupante ola de violencia que ha cobrado la vida de varios candidatos y funcionarios. En una sesión del Consejo de Derechos Humanos en Ginebra, Türk destacó la importancia de salvaguardar los derechos políticos y civiles durante los comicios, dada la magnitud del proceso electoral y los riesgos asociados.
Desde julio hasta febrero, once candidatos han sido víctimas de asesinato, y esta cifra asciende a 22 si se incluyen a funcionarios y familiares de políticos. Esta situación plantea una seria amenaza para la integridad del proceso democrático mexicano y subraya la necesidad urgente de medidas para garantizar la seguridad de los participantes en las elecciones.
México se encuentra inmerso en lo que podría ser el proceso electoral más amplio de su historia, con más de 97 millones de votantes convocados a las urnas el 2 de junio. Más de 20 mil cargos estarán en juego, incluida la presidencia, los escaños del Congreso y varios gobiernos estatales. Ante esta magnitud, la seguridad se convierte en una prioridad vital.
A pesar de los esfuerzos del gobierno mexicano por implementar un mecanismo de protección para candidatos y funcionarios, la violencia sigue siendo una amenaza persistente. Es crucial garantizar la seguridad de los ciudadanos y la integridad del proceso electoral en este momento crítico para la democracia del país.
El llamado de Türk resuena en un contexto donde los derechos políticos y civiles están en riesgo debido a la violencia y la intimidación. La comunidad internacional, a través del Consejo de Derechos Humanos, debe unirse para respaldar los esfuerzos destinados a salvaguardar la integridad del proceso electoral en México y proteger los derechos fundamentales de sus ciudadanos.
El alto comisionado de la ONU insta a las autoridades mexicanas a redoblar sus esfuerzos para prevenir actos de violencia y garantizar un entorno seguro y pacífico para la celebración de las elecciones. Además, hace un llamado a la cooperación internacional para proporcionar asistencia técnica y apoyo en materia de seguridad para ayudar a enfrentar los desafíos que enfrenta México en este período crítico.
En última instancia, la protección del periodo electoral y el respeto de los derechos humanos son fundamentales para fortalecer la democracia en México y garantizar un proceso electoral justo y transparente que refleje la voluntad del pueblo mexicano.