¿Quién es Matteo Zuppi?, otro de los papabiles más fuertes en la sucesión de San Pedro

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30.04.2025 Vaticano.- Una vez que el Vaticano confirmó la fecha del próximo Cónclave Papal para el 7 de mayo y el Museo Vaticano informó el cierre de la Capilla Sixtina,  el proceso de votación los papables sigue dando de que hablar con los llamados Papabiles .

Previo a que este miércoles 30 de abril, los cardenales celebrarán una misa solemne en la Basílica de San Pedro, tras la cual, los menores de 80 años —únicos con derecho a voto— se encerrarán en sesión secreta, el nombre del Cardenal Matteo Zuppi se encuentra entre los favoritos en las apuestas británicas.

Zuppi posee sólidas habilidades diplomáticas, reconocidas por el papa Francisco cuando le pidió al cardenal que liderara una misión de paz para Ucrania en 2023. El prelado italiano, miembro del grupo humanitario católico Sant’Egidio, formó parte de un equipo que ayudó a mediar para poner fin a la guerra civil de Mozambique en 1992. El cardenal, nacido en Roma, es conocido por desplazarse por Bolonia en bicicleta y por su labor de apoyo a la comunidad católica LGBTQ+, refiere CNN.

El cardenal Zuppi es el presidente de los obispos italianos designado por el Papa Francisco en 2029, fue miembro de la Comunidad de San Egidio, párroco de la archidiócesis de Bolonia desde 2015 y es conocido por su compromiso en favor de los marginados.

Hijo de un periodista, también es, por parte de su madre, sobrino nieto de un gran cardenal de la Curia del siglo XX, Carlo Confalonieri (1893-1986). Estudió en el instituto clásico, luego en el seminario diocesano de Palestrina y en la Universidad Pontificia Lateranense (licenciatura en teología); licenciado en literatura y filosofía, también es doctor en historia por la Universidad Laica de la Sapienza, con una tesis sobre la historia del cristianismo. Fue ordenado sacerdote el 9 de mayo de 1981 para la diócesis de Palestrina por el obispo local; en 1988 fue incardinado en la diócesis de Roma y se convirtió en el primer vicario de la basílica de Santa María del Trastévere, cuyo párroco es Vincenzo Paglia, otro futuro cardenal bergogliano, al que sucedió en el año 2000.

Los estudios y el compromiso con los últimos en Roma
Antes de llegar a Bolonia, donde el papa Francisco lo nombró párroco el 27 de octubre de 2015, sucediendo al cardenal Carlo Caffarra, Zuppi -conocido por todos como ‘don Matteo’ y que sigue llamándose así- comenzó su historia personal y sacerdotal en Roma. De hecho, nació en la capital, en una familia de seis hijos: él era el quinto. El primer hito importante fue en 1973, cuando estudió en el instituto Virgilio, donde conoció a Andrea Riccardi, el fundador de Sant’Egidio.

Comenzó a frecuentar la Comunidad y a colaborar en las actividades que ésta promovía al servicio de los más desfavorecidos: desde las escuelas populares para los niños marginados de los barrios bajos de Roma, hasta las iniciativas en favor de los ancianos solos y no autosuficientes, de los inmigrantes y de los sin techo, de los enfermos terminales y de los nómadas, de los discapacitados y de los drogadictos, de los presos y de las víctimas de los conflictos; desde las actividades ecuménicas en favor de la unidad de los cristianos hasta las de diálogo interreligioso, que se concretan en los Encuentros de Asís.

A los 22 años, tras licenciarse en Literatura y Filosofía en la Universidad de la Sapienza, con una tesis sobre la Historia del Cristianismo, el futuro cardenal ingresó en el seminario de la diócesis suburbicaria de Palestrina, siguiendo los cursos de preparación al sacerdocio en la Pontificia Universidad Lateranense, donde obtuvo la licenciatura en Teología. Fue ordenado presbítero del clero de Palestrina el 9 de mayo de 1981 e inmediatamente después vicario del párroco de la basílica romana de Santa María in Trastevere, sucediendo a monseñor Vincenzo Paglia.

Mediador en Mozambique
Incardinado en Roma el 15 de noviembre de 1988, Zuppi ocupó diversos cargos en la capital: de 1983 a 2012, rector de la iglesia de Santa Croce alla Lungara, miembro del consejo presbiteral diocesano de 1995 a 2012; de 2005 a 2010, prefecto de la tercera prefectura de Roma. De 2000 a 2012 fue asistente eclesiástico general de la Comunidad de San Egidio, y fue en esos años cuando vivió otro momento fundamental: en nombre de la Comunidad de San Egidio, Zuppi actuó como mediador en Mozambique en el proceso que condujo a la paz tras más de diecisiete años de sangrienta guerra civil.

Obispo auxiliar
Mientras tanto, en 2010 fue llamado a dirigir la parroquia de los Santos Simón y Judas Tadeo en Torre Ángela, en la periferia oriental de la ciudad, donde todavía se le recuerda con mucho cariño. En 2011 fue prefecto de la 17ª prefectura de Roma. Poco después, el 31 de enero de 2012, Benedicto XVI lo nombró obispo titular de Villanova y auxiliar de Roma (para el Sector Centro). Recibió la ordenación episcopal el 14 de abril siguiente de manos del entonces cardenal vicario Agostino Vallini. Gaudium Domini fortitudo vestra es el lema elegido.

La cita en Bolonia
2015, como se ha dicho, fue el año de su nombramiento en la sede metropolitana de Bolonia, donde Zuppi pronto recibió un gran aprecio por parte del clero local y donde enseguida mostró un fuerte compromiso con la pastoral de los últimos: desde los desocupados hasta los migrantes. Como arzobispo, el 1 de octubre de 2017, recibió al Papa Francisco en una visita pastoral a la archidiócesis. El Pontífice lo creó entonces cardenal en el Consistorio del 5 de octubre de 2019 con el título de San Egidio. Zuppi es también miembro del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral y de la Oficina de Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica.

Perfil
Cardenal culto y humanista, así como hábil negociador de talla internacional, muy familiarizado con la realidad italiana sin dejarse encerrar en ella, el cardenal Zuppi ha tenido una Trayectoria episcopal tanto más rápida cuanto que durante mucho tiempo ha sido uno de los favoritos de Francisco, quien lo empujó hacia la luz.

Es, sin duda, uno de los principales papabiles, apoyado por una amplia franja de prelados italianos y reconocido fuera de la península. Es un papabile de apertura, decidido defensor de la sinodalidad, que continuaría la línea bergogliana: no ha tenido miedo de alzar la voz para oponerse a la política migratoria de Matteo Salvini; ha apoyado con algunas reservas formales la declaración Fiducia Supplicans que permite la bendición de parejas del mismo sexo, y ha prologado un libro del jesuita estadounidense James Martin, defensor de los derechos de las personas homosexuales en la Iglesia.

Por otro lado, está más abierto que Francisco a la misa tradicional en latín, que él mismo ha celebrado en alguna ocasión. Últimamente, puede parecer que está menos en la corte del papa, quien, al enviarlo a Ucrania, señalan los conocedores, le habrían asignado a sabiendas una tarea hercúlea destinada al fracaso.