*
Juchitán, Oax. 06 septiembre 2021.– Luego de las violentas practicas en la disolución de caravanas de migrantes por parte de la Guardia Nacional (GN) y el Instituto Nacional de Migración (INM), el sacerdote Alejandro Solalinde Guerra propuso la creación de un Grupo Puente que atienda, escuche y oriente a los haitianos, hondureños, venezolanos, salvadoreños y guatemaltecos que quieren cruzar el territorio mexicano y llegar a territorio estadounidense.
En entrevista con el Diario El Universal el sacerdote defensor de los derechos de migrantes explicó que el Grupo Puente que plantea entre migrantes y las autoridades federales involucradas en la política migratoria con los migrantes del Caribe, Centro y Sudamérica, podría integrarse con los coordinadores de los albergues, con agentes de la Pastoral de Movilidad Humana del Episcopado Mexicano, con los defensores de derechos humanos y académicos que tienen la experiencia necesaria en el trabajo con los migrantes.
Cuando las redes se inundaban de memes buscando al asiduo visitador de Palacio Nacional y fundador del albergue “Hermanos en el Camino”, en Ciudad Ixtepec, la oportunidad de la entrevista que logra El Universal es destacado ya que no se había escuchado la voz de Solalinde ante el abuso de elementos del Instituto de Migración y la Guardia Nacional, entrenados para una tarea muy diferente pero que desde Donald Trump han cumplido con el encargo de detener el flujo migratorio.
A juicio de Solalinde las autoridades migratorias no deben inmovilizar a los migrantes en la frontera sur, porque es como si quisieran “meterlos en un corral”, lo que atenta contra sus derechos humanos, va contra su dignidad porque son seres humanos que vienen huyendo de la pobreza y de la violencia. Los migrantes merecen ser escuchados, orientados y atendidos, dijo al Diario
Solalinde Guerra cuestionó los métodos de contención aplicados por el INM en la frontera sur, pero acotó, que en su afán de combatir la corrupción, contrataron a militares en retiro que están formados en la política de seguridad nacional y no en temas migratorios que son altamente sensibles.
