Las mujeres han estado y están frente a la pandemia cumpliendo roles en la primera línea de atención sanitaria y social. Justamente sectores altamente feminizados y que exponen a las mujeres a contagiarse y por ende a sus familias. Esto sumado a extensas jornadas laborales que comprometen su salud física y emocional, además de tener que permanecer mucho más tiempo fuera de sus casas.
En nuestro país, las mujeres constituyen al menos el 65 por ciento del empleo en el área de salud. Este porcentaje de mujeres es mayor en las ocupaciones técnicas como por ejemplo enfermeras, parteras, cuidadoras, intensivistas, y todas aquellas que han tenido que sacrificar incluso a su familia para atender a enfermos de otras cormobilidades que el sector salud no atiende.
Primero nos agredían, luego nos dieron medallas y ahora hasta que nos toque reclaman las cuidadoras que no entienden la actitud presidencial.
