Más claro…
Por Felipe Mendiola Parra
Después de la columna que publiqué donde se detalla la pésima calidad del agua “potable” que, distribuye el Grupo Metropolitano de Agua y Saneamiento (MAS), uno de mis lectores me envió unos videos donde se pone al descubierto el deterioro que tienen tres plantas de tratamiento de aguas negras, cuyos vertederos seguramente van a dar a los ríos, lagunas y playas de Veracruz.
Da grima observar el abandono en el que se encuentran esas instalaciones, donde un día se invirtieron millones de pesos, pensando en la salud de los veracruzanos, pero ahora solo quedan ruinas por la irresponsabilidad de esos concesionarios y por las autoridades de los municipios de Veracruz, Boca del Río y Medellín.
Se ha insistido en que dentro de 50 años, las guerras van a ser por el agua, en tanto el hombre no sepa cómo cuidarla y se siga desperdiciando y contaminando los mantos freáticos, pero parece que quienes hoy tienen la autoridad municipal no lo acaban de entender.
Los videos muestran las imágenes de las plantas de tratamientos de aguas negras de Los Volcanes, Río Medio 2 y Las Hortalizas, que se localizan en el poniente y en el norte de la ciudad de Veracruz.
Se pueden apreciar unos 400 metros cuadrados con cada una de esas instalaciones, hoy llenas de maleza, donde abundan mosquitos y mucha agua estancada, donde evidentemente hay miles de larvas de mosquitos, pero el equipo que debiera existir para procesar el agua ya no se encuentra, fueron desmanteladas esas instalaciones.
El Ayuntamiento de Veracruz y todo el cabildo debiera tener en su organigrama un responsable de supervisar esas instalaciones, para repararlas y atender las denuncias diarias que hace toda la ciudadanía de la forma como reciben esos servicios.
La empresa MAS del Grupo Odebrecht, ganó la licitación para atender ese vital servicio y a su llegada ofreció una millonaria inversión para entrar a ese mercado con toda la autoridad, pero nunca fue así, solo es cuestión de revisar ese contrato y descubrir el gran fraude que ha venido cometiendo, en perjuicio de la salud de los habitantes de la 4 veces heroica ciudad de Veracruz.
Me queda claro que el principal responsable es el alcalde Fernando Yunes Márquez, porque él es quien debe velar por los intereses de ese municipio pero tal vez sus intereses son mayores y ha mantenido abandonadas esas instalaciones.
Es urgente la intervención de los diputados locales y federales que tengan la comisión correspondiente, así como la Procuraduría del Medio Ambiente para realizar una inspección rigurosa y fincar la responsabilidad a quien corresponda. Más claro ni el agua.
