“Ya solo restan un año, once meses y medio para que se vaya a … su rancho”

DESDE A JANELA

FELIPE DE JESÚS FERNÁNDEZ BASILIO

“El rey del cash”, prueba circunstancial de la corrupción de AMLO.

La reciente publicación del libro “El rey del cash” al igual que la casa gris del hijo del presidente y las filtraciones de la guacamaya aparte de desnudar la corrupción y las mentiras de López Obrador, le han robado la iniciativa en el manejo de la agenda mediática nacional y lo han puesto a la defensiva.

Tan es así que en estos tres casos en la perorata diaria no ha logrado sacudirse los temas ni mucho menos ha podido defenderse con éxito, ya que en los tres casos los datos han sido demoledores para el mensaje que el presidente ha enarbolado durante lo que va del siglo.

En esta ocasión nos vamos a detener en “El rey del cash” que es un libro que no pretende demostrar jurídicamente la gran red de corrupción tejida en torno a López Obrador, ya que su misma autora dice al por usar dinero en efectivo es muy difícil comprobar ante un tribunal lo ahí narrado, sí nos muestra lo que ha sucedido en casi 23 años con buena parte del dinero de los mexicanos.

El libro en comento no descubre nada nuevo ni tampoco es una rigurosa investigación periodística, ya que se trata de un testimonio rendido en forma de memorias de una persona que fue testigo presencial en unos casos y en otros de oídas en relación a los manejos financieros y algunos aspectos de la vida privada de López Obrador desde que fue candidato por primera vez a la presidencia hasta la campaña en la que por fin resultó vencedor.

La autora es muy honesta en señalar que su testimonio se debe a que fue muchos años esposa de César Yáñez, quien fuera durante 18 años jefe de prensa de López Obrador y que ahora se encuentra en el ostracismo al que el presidente envía a los colaboradores que ya no le hacen falta, pero que durante el tiempo que estuvo bajo su servicio fue miembro del primer círculo del entonces candidato y hoy presidente y por lo mismo estuvo al tanto de las situaciones ahí narradas.

Así que como ya se dijo, lo narrado en el libro en cuestión no descubre nada nuevo ni es por sí mismo una prueba concluyente sobre los manejos financieros de López Obrador, sí que sirve para construir una prueba circunstancial sobre los mismos, ya que tanto por la posición en la que se encontraba la autora del libro como por las cosas que sí se han conocido a través de vídeos, de investigaciones periodísticas, así como del propio actuar de los gobiernos emanados primero del PRD y ahora de MRN, cuya norma es trabajar bajo el pretexto de una falsa austeridad en la que se recorta el presupuesto básico para la operación gubernamental y así desviar el dinero hacia fines distintos y oscuros; y si ello le sumamos el descontento de los funcionarios de cualquier nivel que han sufrido descuentos en sus salarios y hasta la sentencia del tribunal electoral que decretó que Delfina Gómez incurrió en delitos electorales al descontar dinero al salario de los trabajadores del Ayuntamiento de Texcoco cuando fue alcaldesa del citado municipio, dinero que supuestamente era para contribuir al movimiento.

Cabe señalar que en derecho se conoce como prueba circunstancial a aquella que por sí misma no sirve para demostrar los hechos relacionados con ella pero que analizada en conjunto con otras que sí demuestran diversos hechos aislados, sirve para construir la presunción de que esos hechos aislados están relacionados entre sí y fueron realizados por quienes se señala y con un fin preciso; es decir, concatena lo demostrado plenamente.

Y así, si analizamos lo narrado en “El rey del cash” a la luz de los videos de Bejarano, de Ímaz, de Eva Cadena, de los hermanos de López Obrador recibiendo maletas llenas de dinero en efectivo para el candidato o con el de Ponce jugando en Las Vegas o con los acarreos de burócratas y beneficiarios de programas sociales a las concentraciones que el presidente los envía como lo fue el cierre de campaña que hicieron el año pasado con motivo del revocatorio, las cosas cambian y el testimonio contenido en “El rey del cash” se vuelve un hilo conductor que explica todas esas situaciones y muchas otras más.

Otro ejemplo que ilustra muy bien lo anterior, es cuando Elena Chávez nos narra como el entonces Distrito Federal, hoy Ciudad de México, financió durante años a López Obrador merced a que Encinas, Ebrard y Mancera le enviaron cantidades millonarias de dinero mensualmente tanto para su manutención como para pagar altísimos salarios a sus familiares, colaboradores y hasta los integrantes del que fuera su gabinete “patito” en 2006, mientras que, por ejemplo, el metro no tenía mantenimiento; ahora ese mismo dinero capitalino se ocupa en promocionar a Claudia Sheinbaum por todo el país y la Ciudad de México sigue sin atender sus múltiples problemas a pesar de contar con los recursos para hacerlo.

Por último, quiero comentar que, aunque no se sabe si el Sr. Yáñez estuvo o no de acuerdo con lo escrito en el libro, la misma publicación de “El rey del cash” es una muestra más de la desbandada de muchos de los aliados que hicieron posible la victoria de López Obrador y que ahora por muchos motivos se sienten defraudados y/o utilizados sin haber visto sus fines siquiera en vías de cumplimiento.

Los aliados se van, el gobierno empieza a ver su atardecer y la suciedad va saliendo a la luz; el escenario para el 24 se empieza a preparar.

felfebas@gmail.com

Twitter: @FelipeFBasilio