**Astrolabio Político .
/ Por: Luis Ramírez Baqueiro /
“No hay otro camino para la madurez, que aprender a soportar los golpes de la vida.” – William Shakespeare.
Iniciado el proceso electoral sucesorio en Veracruz, especialmente en el partido que hoy detenta todo el poder político, económico y social, llama la atención la guerra fratricida emprendida por algunos de los actores participantes.
De todos era ya sabido que la principal participante a encabezar el proyecto transformador del presidente Andrés Manuel López Obrador era la zacatecana, naturalizada veracruzana por vecindad en la persona de la secretaria de Energía, Rocío Nahle García.
Sabedora de sus altas posibilidades de concursar llegado el momento por el gobierno de Veracruz, la ingeniera en petroquímica tramitó un juicio de protección de derechos políticos desde el año 2016.
Con una residencia de más de 30 años en Veracruz, la hoy secretaria de Energía del Gobierno de México, se pronunció en contra del acuerdo A47/OPLE/ VER/CG/10-02/16 con el que dan cumplimiento a la resolución del juicio para la protección de los derechos político electorales del ciudadano, emitido por el Tribunal Electoral de Veracruz.
Con lo anterior, y abriendo un juicio para la protección de los derechos políticos electorales (JDC), los magistrados por unanimidad le ordenaron contestar al OPLE, quienes evadieron la respuesta de fondo, registrándose de nueva cuenta otro JDC 23/2016, donde se realizó un estudio de fondo legal sobre los requisitos de elegibilidad, analizando la Constitución, así como el Código Electoral y anteponiendo el derecho universal que tiene todo ciudadano de “votar y ser votado”, la Sala Regional le ordenó al Organismo Electoral le contestara palabras más, palabras menos a Rocío Nahle que si puede ser candidata a la Gubernatura de Veracruz.
Dicha resolución fue explicada claramente por un experto en derecho electoral que quedo en vídeo a través de las redes https://twitter.com/tinojarocho/status/1523467364050046976?s=24&t=aBBtPDpELy8O-wrSLL4I8g
De esta manera, llama la atención que nuevamente que previó a levantarse la encuesta de reconocimiento por parte de los Órganos Nacionales de Morena que definirá quienes serán los afortunados aspirantes a alzarse con la Coordinación Estatal de la Defensa de los Comités de la 4T en Veracruz reaparezca el tema de la vecindad. https://encontacto.com.mx/comision-de-elecciones-designara-sin-favoritismos-a-coordinador-de-la-4t-mario-delgado/
Suena en verdad absurdo pelearle legitimidad a quienes, no habiendo nacido en Veracruz, han hecho vida y carrera en estas tierras, dejando lo mejor de ellos y de sus familias para el fortalecimiento de la entidad.
Pero bueno, esta actitud no es de espantar a nadie; la realidad política del país en los tiempos de la 4T ha sido la de contribuir al incremento de la violencia política de género que muchos de los miembros activos de Morena, practican.
Y si eso no fuera cierto, bastaría con recordar el caso de uno de los propios aspirantes veracruzanos a suceder a Cuitláhuac García Jiménez, sobre quien pesan graves señalamientos de infringir esa violencia política de género como parte de su desarrollo en la función pública. https://www.elmercuriodeveracruz.mx/nota.php?id=34245
El caso de Eric Patrocinio Cisneros Burgos, quien tapizo Veracruz con su promoción personal, en bardas, espectaculares, taxis, bajo el falso disfraz de ser una revelación de las letras españolas y profundo defensor de la tercera raíz –afrodescendientes- es la evidencia confirmada de sus actos anticipados de campaña.
Más gravé ahora que aparecen mantas por algunos puntos del territorio veracruzano, pretendiendo endilgar la versión del origen zacatecano de la puntera en la preferencia morenista, como si el tema no hubiera sido debidamente aclarado.
Pero que nada nos sorprenda, el fuego amigo, abierto por las diversas huestes morenistas en contra de sus propios compañeros de proyecto político es la confirmación de que las pasiones humanas se desbordan cuando los valores morales y los principios no fueron mamados correctamente desde la cuna.
Bien se afirma por ahí que aquel que desde el origen sale mal hijo, jamás y nunca habrá de ser buena persona, y mire que en Otatitlán se cuentan unas cosas, que quedarán para el anecdotario político veracruzano, solo confirmado, por el éxodo bajacaliforniano que cierto personaje tuvo que emprender para evadirse de la cuna paterna ante su mal proceder.
Ahora bastará ver que tanto sube de tono esta guerra fratricida, pues en la Ciudad de México, recientemente apareció otro caso similar en el intento por acabar con las aspiraciones y preferencias de los capitalinos en la persona del ex secretario de Seguridad Pública, Omar Hamid García Harfuch.
A quien han puesto en jaque ante los ataques y señalamientos sobre sus supuestos nexos y participación en el tema de los 43 estudiantes desaparecidos de la Normal de Ayotzinapa.
El ánimo en Morena está caldeado y el terrorífico actuar de algunos morenos es ya la evidencia de esa guerra por el poder.
Al tiempo.
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