Inmuebles históricos de Veracruz, otros seis años en el olvido

Por Yamiri Rodríguez Madrid

Veracruz es uno de los estados más ricos en historia; por aquí, hace más de 500 años, inició la conquista, la fusión de tres mundos que dieron paso a lo que hoy somos los veracruzanos.  Tenemos la fortuna de tener, prácticamente a lo largo y ancho de nuestro territorio, los testigos de piedra de esos episodios que dieron forma al país y al continente.

Por ende, el recorte planteado por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) a diversas dependencias e instancias para supuestamente ahorrar recursos y así hacer frente a la pandemia del Covid19, nos afecta severamente en la preservación de nuestro legado histórico.  Si el gobierno federal no se retracta de quitarle el 75 por ciento de sus recursos al Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), está prácticamente perdido y nuestras zonas arqueológicas y edificios históricos, en riesgo de desaparecer.

De todos es sabido el desdén con que diversas administraciones federales han tratado al INAH, lo que les ha impedido a arqueólogos, antropólogos, lingüistas, científicos, investigadores y demás personal, hacer su trabajo como debería de ser.  Eso ha provocado que muchos sitios arqueológicos en este país estén en el abandono y, varias zonas arqueológicas sin poder terminarse de explorar, pues simplemente el presupuesto ha sido paupérrimo. En Veracruz, por ejemplo, la ex hacienda de San Antonio Limón, en Totalco, esté abandonada y pintados sus muros con anuncios de cementeras y tiendas de pinturas vinílicas.   Antiguos centros ceremoniales en la costa se los está devorando el tiempo y la maleza porque simplemente, alguien detrás de un escritorio decidió que no era prioritario.

Según los propios trabajadores sindicalizados del INAH con este mayúsculo pase de tijera, la operación y preservación de 194 zonas arqueológicas, 162 museos y 515 monumentos históricos se quedarían con solo 15 millones de pesos para lo que resta del año, o lo que es lo mismo: a la buena de Dios. Peor aún, es el despido de cientos de trabajadores pues ese monto no alcanza ni para la nómina, ni para la renta de inmuebles.

Es cierto que hay prioridades en el país, pero si de una buena vez le amarraran la mano a todos los corruptos que hay en todos los niveles de gobierno, alcanzaría para atender lo apremiante y rescatar nuestro invaluable tesoro histórico.

@YamiriRodriguez