**ENTRESEMANA.
/ MOISÉS SÁNCHEZ LIMÓN /
¿Te acuerdas Andrés Manuel? ¡Al diablo con las instituciones!
Hoy, el canto de tu equipazo que arenga a la fanaticada, se suma en ese coro de insultante valemadrismo, impunidad que te adula: “¡No está solo!, ¡No estás solo!” Y la ley es nada, nunca como antes letra muerta.
¡Ah!, esa dupla de Adán Augusto y Mario Delgado con la cómplice presencia del general de división Luis Rodríguez Bucio, en plena campaña para llamar a las urnas en la inútil próxima jornada de consulta de revocación de mandato.
Sí, ese experimento del próximo domingo 10 para que el pueblo bueno vote por los candidatos de la 4T a los seis gobiernos que se dirimirán en junio próximo y, ¿a poco no?, en tu ansiada pero, mentís propio, negada reelección en 2024, ausente la autoridad electoral, desmadrada la ley, socavadas las instituciones. Porque…
Sí, sí, tu dizque postura democrática, en que has convertido a la máxima maderista “sufragio efectivo, no reelección”, es hueca cuanto huecas tus promesas porque eres el Duce, cabeza del caudillismo del nuevo siglo. Pero…
Recuerda que Plutarco Elías Calles tuvo a Lázaro Cárdenas en el severo contrapeso que lo exilió y Díaz Ordaz a Luis Echeverría y éste a José López Portillo, uno fue nombrado efímero embajador en España y el otro, que movió las aguas rumbo a la reelección, en Australia, Nueva Zelanda y las Islas Fiji.
¡Ay!, Andrés Manuel, Andrés Manuel.
Corta es la memoria cuando el Caudillo cree que tiene al país en un puño y alienta a sus alfiles como lo haces con Adán Augusto que, en el periplo proselitista a tu favor y el propio, se pasea en aviones de la Fuerza Aérea Mexicana como si anduviera en tierras tabasqueñas cual jilguero que te ensalza y le vale un pito la ley.
Y amenaza al INE que, si lo corren del cargo, se plantará en la contra esquina de Palacio Nacional y la Suprema Corte de Justicia de la Nación para gritar “es un honor estar con Obrador”. En serio.
Envalentonado, sabedor de que lo cobijas y que el manto de la impunidad es el sello de tu gobierno, Andrés Manuel, porque eres el emperador, Su Alteza Serenísima, dueño del gobierno, Adán Augusto grita y blofea en Sonora lo que, en sus tiempos de priista no se atrevió porque, pese a que el PRI era el partidazo en el poder, había respeto por la ley.
“Se equivocan los adversarios –dijo Adán Augusto, el pasado fin de semana–y se equivocan los del INE, pues como dijo Alfonso (Durazo) esos ya se van, los vamos a ver pasar ahí por el frente con la cola entre las patas.
“Ya todos ustedes saben que se va a presentar una iniciativa de reforma electoral, donde se van a ir todos esos que ahora se llaman autoridades electorales, porque además México va a ser el primer país del mundo, donde la gente, donde el pueblo elija democráticamente, en las urnas a quienes van a conducir las próximas elecciones, será voto directo y secreto de los mexicanos para dotarnos de la autoridad electoral que nos merecemos.
“Ya basta de tanto absurdo discurso, la democracia, la participación ciudadana se queda para siempre, este ya es otro país, México ya cambió. México se transforma día día con un presidente patriota”.
En serio. Insisto, Andrés Manuel, corta y selectiva memoria. Adán Augusto y tú fueron elegidos bajo las reglas que ahora desconocen; fueron estos consejeros electorales que tanto desprecias y ahora insulta Adán, siguiéndote en el coro fácil, los que sancionaron sus triunfos en las urnas.
¿Anda en campaña como tu corcholata? Lo niegas en la mañanera, tu espacio de confort, desde donde insultas y reclamas porque dices que te insultan, pero tú, Su Alteza Serenísima, tienes una tribuna, el púlpito privilegiado para desgranar, impune e insolente lo que te venga en gana. Mientes como respiras.
“Y en el caso del secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, pues él está visitando los estados para cumplir con su responsabilidad, no para promover la consulta, no va a mítines (¿no?).
“Él, para que se tranquilicen, se serenen los adversarios, está ayudándome en la transformación, no es precandidato a la Presidencia”, explicas sin que se te pida explicar lo evidente, el mensaje, el video que capta, enfundado en esas guayaberas de moda en la 4T, émulas del echeverrismo, a tu secretario de Gobernación en tareas ajenas a su cargo.
–¿Por qué?–, te pregunta Adriana Estela Flores, reportera de IMER Noticias, en alusión a tu negativa del papel de Adán-
–Porque me está ayudando a la transformación del país. Entonces, que no se confundan, él no está haciendo campaña para ese propósito—respondes con esa ambigüedad muy tuya.
–¿No es ‘corcholata’, presidente, Adán?—te acota Adriana Estela.
–No, no está actuando de esa forma—insistes y ofendes a la senadora Olga Sánchez Cordero cuando refieres:
“Yo necesitaba un secretario de Gobernación que me ayudara al cumplimiento de la agenda, que tiene que ver con el interés público, con la defensa del pueblo, con la protección del pueblo, con el beneficio del pueblo, con la paz, con la tranquilidad. Que no tuviese su agenda, sino que me ayudara a cumplir la agenda que tiene que ver con la transformación de México y a eso está dedicado”. ¡Caray!, o lo que es lo mismo: doña Olga no te ayudaba. ¿Por qué la designaste secretaria de Gobernación? Lo dicho: traiciones a tus colaboradores, los usas y desechas y eso se llama deslealtad.
¡Ah!, pero en ese tu ánimo patriarcal, dice que, “de todas maneras, si hay denuncias en su contra (de Adán Augusto), pues que la autoridad competente resuelva. Eso es lo que puedo yo comentar”. ¿Qué autoridad? ¿La que tú y Adán desprecian y les pintan un violín para demostrarles que valen lo que se le unta al queso?
Pero…
Modosito, el gobernador de Tabasco con licencia, en funciones de secretario de Gobernación, ha negociado con la oposición para que, en el Congreso de la Unión, prosperen tus ocurrencias solventadas como iniciativas patriotas para reformar a la Constitución y las leyes secundarias, aunque está visto que las leyes no te importan porque la ley eres tú.
Eres el Duce, el caudillo que en la Presidencia de la República, dueño del poder omnímodo, monarca que, solitario, pasea en los corredores de Palacio Nacional y se solaza y chasquea la boca burlándose de quienes le gritaron, premonición acaso, que era un peligro para México.
Ahí tienes al ínclito Ricardo Mejía Berdeja, que abandona tareas y responsabilidades como subsecretario de Seguridad y Protección Ciudadana para promover la consulta de revocación de mandato y promoverse, de pasadita, como aspirante al gobierno de Coahuila. ¿Y la seguridad de los mexicanos? ¡Bah!, que se rasquen con sus uñas, abrazos no balazos. ¿A poco no?
Y desde 2006 cabalgaste en el jamelgo del valemadrismo, cuando derrochaste el bono democrático y endeudaste al PRD con tu absurdo plantón en Paseo de la Reforma, y fíjate que había tierra fértil abonada con la insultante corrupción de la que hoy es oposición y te dijo, este lunes, que tus ocurrencias, como la reforma a la industria eléctrica no pasará.
No tienes mayoría en el Congreso de la Unión, Andrés Manuel, y la requieres para las reformas constitucionales como la político-electoral. Adán y tú se quedarán con las ganas de correr a Lorenzo Córdova y a Ciro Murayama y de desaparecer al Instituto Nacional Electoral, órgano colegiado que el domingo último defendieron ciudadanos en marchas realizadas en 20 ciudades del país.
Y te duelen, es evidente, esas movilizaciones que no son acarreos, de ciudadanos que están hartos de tu gestión, incluso aquellos que votaron por ti en 2018. Y les restas credibilidad, representatividad, los insultas.
“Pero ayer (domingo) –dijiste en la mañanera–salieron a decir que no se participara (en la consulta del domingo 19) y fue muy interesante, porque son sectores conservadores que no están de acuerdo con el programa de transformación, que ese es el fondo; y no necesariamente son fifís, son como aspirantes a fifís, pero son bastantes, no los que salieron ayer, sino los que tienen ese pensamiento aspiracionista.
“Y también muy groseros, porque es un conservadurismo hipócrita. Según ellos, son gentes de bien, se llegan a autonombrar bien nacidos y se creen de la moronga azul, pero son groseros y muy clasistas y racistas, discriminatorios, de los que tratan de manera despectiva a las trabajadoras domésticas. Es un prototipo, o sea, muy individualistas, y también muy faltos de información. Tienen como referentes para las letras, para la literatura, a estos escritores de best seller”.
Te duelen, Andrés Manuel, te duelen los reclamos que se suman todos los días y te lo demuestran en tus giras por el interior del país. A Felipe lo llamaste “Comandante Borolas” y te quejas porque una señora llevaba un cartel con el que te identifica KKs. Sí, es un insulto, pero ¿qué has hecho para que te respeten todos los mexicanos, todos no sólo tus “30 millones”?
No, no estás sólo, hay un enorme repudio popular que te acompaña. El domingo 10 puede ser tu domingo 7. Digo.
sanchezlimon@gmail.com www.entresemana.mx @msanchezlimon @msanchezlimon1