Por Yamiri Rodríguez Madrid.
A menos de un año de que se celebren las elecciones del 2021, los morenistas veracruzanos echaron las campanas al vuelo cuando salió una encuesta que, ellos interpretaron, afirmaba que en Veracruz se llevaban carro completo, pero como dijo Jack El Destripador, vámonos por partes.
Esa única medición era sobre las preferencias en los 20 distritos electorales y, sí leían bien, decía también la empresa que la disputa estaba en los cinco grandes padrones, uno de esos Veracruz.
Si se revisa cada uno de estos, se comprueba que hay una disputada bipartidista entre Morena y el Partido Acción Nacional (PAN), por lo que hay que esperar los careos con candidatos y, por supuesto, el peso que tendrán las alianzas, los recursos, la operación política y el desgaste político que se acumule.
Esta semana salieron dos nuevas encuestas donde el trabajo del morenista número uno de este estado, osea el gobernador Cuitláhuac García Jiménez, no está bien evaluado, por lo que no será, de ninguna manera, un factor de impulso para sus candidatas y candidatos.
No hay obra pública digna de presumir, tampoco acciones certeras que sean un plus a la hora de votar; de ahí que la apuesta presidencial sea el estar constantemente en nuestro estado, como los tres días que pasó la semana pasada aquí.
Este lunes, Demotáctica y Campaigns and Elections, publicó su quinto ranking de desempeño de gobernadores, en el que el veracruzano sale a media tabla, en la posición décimo quinta con 44.5 de aprobación. Un día antes, México Elige en su encuesta lo ubicó de manera similar con solo 41.6 por ciento de aprobación y entre los diez peores.
Y Consulta Mitofsky lo sitúa entre los peores gobernadores, en el puesto 29, con una desaprobación de 67.1 por ciento.
Pero si nos vamos más atrás, nuestro gobernador nunca ha estado entre los diez mejores, pero sí en los diez peores.
@YamiriRodriguez
